El dato puede resultar clave de cara a las elecciones de este año, que el Gobierno aspira a postergar un mes para minimizar riesgos de contagios y dar tiempo a que avance el plan de vacunación.
Según la encuesta, el diferencial de aprobación también se da entre aquellos que tienen un familiar de riesgo que ha recibido la vacuna y aquellos que siguen esperando el turno. Entre quienes han logrado que todos sus familiares de riesgo fueran vacunados, el 60% aprueba la gestión presidencial (36% en contra). La situación entre quienes tienen solo alguno de sus familiares de riesgo inoculado cambia: 39% a favor, 50% en contra. Y entre aquellos que no han conseguido vacunar a sus seres queridos el tablero queda 32% a favor y 63% en contra.
Otra pregunta que registra el estudio es: “¿Usted diría que la Argentina está entre los países que mejores logros tiene en la lucha frente al coronavirus, entre los países con peores logros o está en el promedio de los países?” Entre quienes se vacunaron ya el 37% responde que sí (el 29% responde que el país está entre los que peor manejaron la situación); entre quienes no se vacunaron el sí baja a 19% (y el 50% dice que está entre los peores).
A medida que crece la curva de contagios de coronavirus, aumenta también el porcentaje de la población que considera necesario endurecer las medidas de restricción a la circulación: un 41% de los argentinos (8 puntos más que en febrero) se expresan en ese sentido. Esta suba tiene el impulso de los sectores sociales afines al Gobierno: entre aquellos que Poliarquía denomina “cristinistas” el aval a las restricciones pasó de 43% a 83% en las últimas tres mediciones y en el grupo de “peronistas no K " subió de 33% en febrero a 49% en abril. Entre sectores sociales independientes y cercanos a Cambiemos aumenta la demanda por flexibilizar las medidas de restricción. La posición a favor de endurecer las medidas crece en la Capital (de 26% a 40% en los últimos tres meses) y se mantiene estable en el resto del país.
Sobre las medidas anunciadas el jueves pasado, las opiniones se encuentran divididas: el 46% está de acuerdo y el 47% en desacuerdo. Entre los cristinistas el apoyo asciende a 87%, indicó Poliarquía. El acuerdo a las nuevas restricciones es similar entre los peronistas no cristinistas y los independientes (45% y 44% respectivamente) y es menor entre los “macristas” y entre los que simpatizan con Juntos por el Cambio (23% y 32%).
La aprobación general de la gestión de Fernández en relación con la pandemia se mantiene estable en torno al 40%. El rechazo sube tres puntos y alcanza el valor más alto de la serie: 52%. El 64% sostiene que los casos han vuelto a crecer por la falta de cuidados entre los ciudadanos. Son minoritarias las posiciones que responsabilizan al Gobierno o creen que es la evolución natural del virus.
Sin embargo, la población señala al gobierno de Alberto Fernández por la falta de vacunas (54%). Solo el 5% sostiene que el proceso avanza normalmente, un 30% responsabiliza a la demora mundial en la producción. A su vez, un 44% de los entrevistados sostiene que el país está entre los países que peores resultados tiene en materia de control de la pandemia y un 59% que se encuentra entre los que menos han vacunado.
El 55% de los encuestados cree que las probabilidades de contagiarse de coronavirus son muy altas o altas, el mayor registro desde el comienzo de la pandemia en el país, de acuerdo con los registros de Poliarquía.
El trabajo de campo se realizó entre el 8 y el 12 de este mes, entre residentes en la Argentina, en centros urbanos de más de 10.000 habitantes, mayores de 18 años de edad (encuesta telefónica por IVR). Fueron 1784 casos, con un error estadístico de +/- 2.32% para un nivel de confianza del 95%.
